¿Consideraríais a la sidra como una "bebida embriagadora"? Según los historiadores, el término "sidra" proviene del griego "sikera", que derivaría luego al "sicera" del latín. Y precisamente eso es lo que esta palabra significaba: bebida embriagadora.

 

 

Lo que queda claro, así, es que estamos ante una bebida con muchos siglos a su espalda. Se sabe que no fueron los romanos sus descubridores, ya que dataría de fechas anteriores -como bien demuestra el término griego "sikera", que antes mencionábamos-. Los soldados romanos la descubrieron al ir anexionando nuevos territorios a su Imperio.

 

En cuanto al enriquecimiento del producto, como ocurrió con muchos otros, fue la civilización árabe la que comenzó a trabajar la sidra con diferentes tipos de manzanas, produciendo a su vez diferentes tipos de sidra, convirtiéndolo en una bebida más rica y variada.

 

Y de ahí, al mundo. Incluyendo el Nuevo Mundo, ya que los europeos la llevaron consigo a América, entre otros muchos productos, en su esfuerzo colonizador.

 

Volviendo a Europa, ni que decir tiene que uno de los lugares donde más arraigó fue en Euskal Herria, como bien sabemos. Antes del siglo XIX el consumo de sidra ya estaba extendidísimo en nuestra tierra. Pero esto es algo que ya os contamos en este artículo sobre el origen de nuestro sagardo, que, por supuesto, ¡os animamos a recuperar!